Imagina que un día te levantas y ves que puedes hacer cosas raras. No sé, que puedes leer la mente de las personas, que puedes volar, que puedes moverte en el tiempo y el espacio (incluso manejarlo a tu antojo) o que puedes curar tus heridas instantáneamente. Eso es lo que hacen los protagonistas de "Héres" (que, por cierto, son unos cuantos).
Tenemos como conector de todos ellos a Mohinder Suresh (Shendil Ramamurthy), un científico indio que sigue con las investigaciones de su padre acerca de gente con poderes paranormales. Y en su camino se cruzan muchos individuos que hacen cosas "diferentes".
Por ejemplo, Isaac Méndez (Santiago Cabrera), entra en trance y es capaz de pintar lo que va a pasar en el futuro. Elle Bishop (Kristen Bell) tiene unas corrientes eléctricas en su cuerpo que puede utilizar a su antojo. Claire Bennet (Hayden Pennetierre) puede curarse de cualquier herida y/o enfermedad que puede sufrir, incluida la muerte. Matt Parkman (Greg Grunberg) puede leer la mente de las personas, y con el tiempo incluso es capaz de colocar pensamientos en ella, obligando a la víctima a cumplir su voluntad. Nathan Petrelli puede volar. Pero quizá los personajes con poderes más espectaculares son Hiro Nakamura (Masi Oka), que controla la unidad espacio-tiempo a su antojo; Niki Sanders (Ali Larter), que descubre que el espíritu de su difunta hermana maligna reside en su interior y se manifiesta por los espejos; y Peter Petrelli (Milo Ventimiglia) que es capaz de copiar los poderes de la gente a la que se acerca e irlos almacenando en su interior.
Pero como en toda historia de superhéroes hay villanos. EL principal malo-malísimo es Gabriel 'Sylar' Grey (Zachary Quinto), cuyo poder es el más simple que s epuede imaginar: saber cómo funcionan las cosas. Pero sabe cómo utilizar ese poder, y con él descubre la forma de robar los poderes a los demás. Sólo hay un problema, que tiene que matar al otro portador del poder. Y así va por la vida, matando gente para adquirir más y más poderes. Hasta que un día...
Y hay más malos malísimos: Angela (Christine Rose), la madre de los hermanos Petrelli, que tiene poderes pero son aún desconocidos para el gran público; Linderman, que tiene el poder de curar a los demás, pero desgraciadamente pasa sí mismo no es capaz de autosanarse; Cissy, que cambia de forma; Adam Monroe (David Anders), que tiene poderes muy similares a los de CLaire (tiene 400 años de edad)... la lista es interminable.
Y así pasan la serie, complicando la trama mientras los buenos se enfrentan a los malos, éstos se enfrentan entre ellos, aquéllos también... En definitiva, una serie sublime, pero a la que hay que prestar muchísima atención para poder entender.